Podemos aprender a vivir más felices, más sanos y mejor utilizando la filosofía del yoga. Aunque la orientación de las filosofías se desarrolló hace mucho tiempo, puede aplicarse fácilmente a la vida moderna.
Los Yamas son la primera de las Ocho Extremidades del Yoga. Practicar los Yamas nos anima a ser conscientes de nuestros pensamientos y acciones. Al reforzar nuestra conciencia, podemos tomar decisiones más sanas y evitar patrones de pensamiento negativos.
En este blog, exploramos el significado de los Yamas en el yoga y cómo puedes incorporarlos a tu rutina diaria para tener una vida con más sentido y propósito.
¿Qué significa Yamas?
Yamas significa "restricción" o "dominio" en sánscrito. En la filosofía del yoga, los Yamas son las cosas que debemos abstenernos de hacer. Cuando utilizas los Yamas para mejorar tu autocontrol (restricción) y purificar tus intenciones, tu carácter mejora.
Los Yamas no deben confundirse con los Niyamas, que es la segunda rama del camino hacia la iluminación. Los Niyamas son hábitos recomendados o acciones cotidianas para llevar una vida sana e integral. Juntos, los Yamas y Niyamas del yoga pueden definirse como códigos morales o principios éticos que nos guían en nuestro viaje hacia la conciencia espiritual.
¿Qué son los 5 Yamas en Yoga?
La filosofía del yoga comenzó como una historia hablada. Esto significaba que gran parte de la información de los textos antiguos estaba incompleta o se relataba de forma diferente. Muchos textos describen cinco Yamas, mientras que otros describen diez. Los Yamas enumerados en los textos son ejemplos, no una lista completa de todos los Yamas.
Aprendí la sabiduría oral del yoga de mis maestros en India, los cualesme enseñaron que hay veintisiete Yamas en total. No parece existir ningún texto que enumere los veintisiete, por lo que no tenemos un registro moderno de muchos de los antiguos Yamas.
Los cinco Yamas del yoga mejor reconocidos son los que figuran como ejemplos en Los Yoga Sutras de Patanjali:
- Ahimsa (no violencia)
- Satya (verdad)
- Asteya (no robar)
- Brahmacharya (no indulgencia)
- Aparigraha (no posesividad)
En otros textos se describen otros cinco Yamas:
- Ksama (paciencia, perdón)
- Dhrti (fortaleza, perseverancia con el objetivo de alcanzar la meta)
- Daya (compasión)
- Arjava (no hipocresía, sinceridad)
- Mitahara (dieta controlada)
Cómo realizar los 5 Yamas del Yoga
Los conceptos de los Yamas deben practicarse en nuestros pensamientos, palabras y acciones. Esto nos ayudará a evitar vivir de forma falsa o inconsciente. Si reflexionamos sobre los Yamas e intentamos aplicarlos en nuestra vida, podremos crear una existencia más consciente y pacífica.
Puedes acercarte a los Yamas leyendo y contemplando cómo se relaciona cada uno de ellos con tu vida. A la hora de hacer cambios y aplicar los Yamas, tendrás más éxito si eliges un cambio cada vez. Haz que este cambio forme parte de tu vida, para que te parezca normal y natural antes de empezar a hacer otro cambio. Aunque lleva tiempo hacer cambios de esta manera, será más eficaz.
Yama 1: No violencia (Ahimsa)
El sánscrito "himsa" significa violencia o daño y "ahimsa" significa su opuesto: no violencia. Se trata de un concepto sencillo con una profundidad sorprendente. Anima a evitar la violencia tanto hacia nosotros mismos como hacia otros seres, humanos o no.
El daño o la violencia a los que se refiere Ahimsa no se limitan a la violencia física. También incluye el daño mental y emocional.
Cómo practicar la No Violencia (Ahimsa)
La violencia o el daño aparecen en nuestras vidas de muchas formas. El primer paso para practicar Ahimsa es tomar conciencia del daño que podemos estar causando. Puede que sea imposible evitar por completo todo daño. Los Niyamas nos enseñan a practicar una buena higiene, pero lavarnos causará daño a las bacterias y otros microbios que viven en nuestra piel. La limpieza puede destruir los hogares de las arañas, o a las propias arañas. Tenemos que encontrar un equilibrio para poder llevar una vida productiva y sana, causando al mismo tiempo el menor daño posible.
Las estrategias para practicar Ahimsa incluyen
- Evita la violencia física hacia ti mismo y hacia los demás. Esto puede significar resistirse a la presión de los compañeros para participar en actividades peligrosas, y controlar tu ego para reducir tu necesidad de demostrar tu valentía.
- Evita los alimentos o bebidas que puedan dañar tu organismo.
- Practica la amabilidad, la aceptación y el perdón hacia ti mismo y hacia los demás.
- Minimiza el daño a las criaturas diminutas que intentan compartir tu casa: tal vez puedas reubicarlas o impedir que entren en la casa en lugar de matarlas.
- Reduce el daño que te haces a ti mismo aprendiendo a controlar los patrones de pensamiento negativos y a gestionar las emociones negativas de forma saludable.
Yama 2: Verdad (Satya)
En Satya, se nos anima a reconocer la verdad universal en comparación con nuestra verdad personal. Una vez que empiezas a reconocer la verdad universal, también empiezas a vivirla. Esto es lo que hace que los Yamas de Satya signifiquen algo más que simplemente no decir mentiras. ¿Cómo puedes decir la verdad si no conoces la verdad?
Con Satya ves las cosas como realmente son, en lugar de cómo te gustaría verlas o cómo esperas que sean. Sentirte cómodo con este nivel de honestidad te permitirá aceptar las cosas -incluido a ti mismo- tal y como son realmente.
Cómo practicar la Verdad (Satya)
Satya consiste en comprender y aceptar la verdad sobre ti mismo y sobre el mundo que te rodea.
Las estrategias para practicar Satya incluyen
- Reconoce que tus percepciones pueden estar influidas por tus sentimientos, emociones o expectativas, y por las limitaciones de nuestros sentidos y de la mente.
- Intenta mirar más allá de tus percepciones iniciales para ver qué es real. Por ejemplo, "He enviado un mensaje a mi amigo y no he recibido respuesta" es real. Las explicaciones que creamos en nuestra mente ”me están ignorando, no les gusto, les he ofendido, están siendo groseros” no son reales.
- Di tu verdad y defiende lo que piensas mientras sea seguro hacerlo.
- Exprésate con claridad y precisión.
- Pide más información si los demás no se expresan con claridad.
Yama 3: No robar (Asteya)
Definido como no robar, Asteya es la práctica de no coger algo que no es tuyo. Como ocurre con los cinco Yamas del yoga, va más allá de lo obvio. No se trata sólo de no robar objetos como coches o dinero. En la filosofía del yoga, el robo se refiere a aprovecharse injustamente o al intercambio injusto, lo que puede significar hacer deliberadamente tratos injustos, no hacer un trabajo tan bien como podrías haberlo hecho o fingir que las ideas de alguien son tuyas.
Cómo practicar el No Robo (Asteya)
La concienciación es importante porque la mayoría de la gente cree que no roba. Sin embargo, el robo se cuela en nuestras vidas en formas como holgazanear en el trabajo o hacer un comentario rencoroso que roba la alegría a alguien. A menudo, el impulso de robar surge de una infelicidad interna o de los celos, por lo que podemos reducirlo siendo más conscientes de nosotros mismos y encontrando formas sanas de satisfacer nuestras necesidades y sentirnos satisfechos.
Para evitar los robos, elige objetivos personales como:
- Dar lo mejor de ti en el trabajo o cuando ayudas a los demás.
- Cumplir las promesas.
- Actuar con amabilidad y apoyo.
- Hacer tratos justos y gangas sin buscar un trato mejor para ti.
Sé generoso con las cosas que puedes permitirte dar a los demás, aunque sólo sea una sonrisa. La generosidad es lo contrario de robar, y crea una positividad que contrarresta el impulso de robar.
Yama 4: No indulgencia (Brahmacharya)
Abusar de los placeres sensoriales puede causar problemas e infelicidad en nuestra vida. Brahmacharya nos anima a controlar nuestros deseos y a reducir nuestro uso de las indulgencias sensoriales. Nuestros sentidos nos distraen de formas más importantes y eficaces de encontrar la felicidad y la satisfacción.
Brahmacharya no exige abstinencia, ni evitar por completo todo lo agradable. Simplemente te pide que disfrutes de lo que ya tienes en la vida y busques el placer con moderación.
Cómo practicar la No Indulgencia (Brahmacharya)
Evitar entregarse en exceso a los placeres físicos es el principio básico de Brahmacharya. Puedes considerar ideas como
- Evitar actividades o sustancias que se sabe que crean adicción.
- Comer por placer de vez en cuando, pero hacer la mayoría de tus elecciones alimentarias por salud y no por placer.
- Elegir sabiamente el entretenimiento (libros, películas, juegos, etc.) para que tu mente no se distraiga constantemente con pensamientos de búsqueda de más entretenimiento.
- Observar tus deseos frente a tus necesidades.
Cuando busques placer, considera actividades que sean buenas para tu salud o bienestar, además de placenteras. Pasear por la naturaleza o recibir un masaje reparador podrían encajar en esta descripción si se utilizan con moderación.
Yama 5: No Recolección (Aparigraha)
Vivimos en un mundo en el que se fomenta el materialismo. Constantemente recibimos sugerencias de que poseer más nos hará más felices: más ropa o zapatos, más artilugios, casas más grandes y coches más elegantes.
Aparigraha nos anima a rechazar este impulso de poseer más cosas. También nos insta a sentirnos menos posesivos con las cosas y las personas de nuestra vida. Esto está estrechamente relacionado con el sentimiento de celos, por lo que Aparigraha sugiere que no actuemos según nuestros sentimientos de celos, sino que aprendamos a encontrar satisfacción en una vida más sencilla.
Cómo practicar la No Recolección (Aparigraha)
Empieza por contemplar lo que posees, por qué posees esas cosas y cómo te sientes respecto a ellas. ¿Te aferras a las posesiones por miedo a perderlas? Si es así, puede que reduzcas tu apertura a recibir otras cosas que podrían ser más importantes para tu bienestar.
Algunas ideas a tener en cuenta
- Antes de adquirir un nuevo artículo (zapatos, una suscripción de streaming, un coche), pregúntate si realmente lo necesitas. ¿Tienes ya suficiente? ¿Necesitas lo nuevo ahora o puede esperar?
- Comprende que la posesividad también se aplica a las personas. Aprender a gestionar y reducir los sentimientos posesivos conducirá a unas relaciones más sanas.
- Haz un buen uso de las cosas que posees, sin apegarte emocionalmente a la propiedad o al resultado. Esto conducirá probablemente a una menor necesidad de más posesiones.
- Cuida igual de bien los objetos, tanto si son tuyos como si pertenecen a otra persona.
Vivir los Yamas
La práctica de los Yamas está profundamente arraigada en la contemplación de los conceptos y en la evaluación de cómo se aplican en tu vida. Gran parte del beneficio depende de la alteración de los procesos de pensamiento más que de la alteración del comportamiento. Si tu contemplación revela áreas en las que deseas hacer cambios, recuerda hacerlos lenta y suavemente. Reflexiona sobre tus progresos con amabilidad y generosidad.
Esforzarnos por mejorar nuestra conciencia y estimular el crecimiento interior puede ser muy desafiante. Puede que haya aspectos que creas comprender ahora, que entenderás de forma muy diferente dentro de unos años. Será un proceso evolutivo, y encontrarás capas más profundas a medida que tu carácter interior se fortalezca y crezca.